El domingo de Ramos que nos espera

Este fin de semana, toda España será un hervidero de mítines y actos con la vista puesta en las elecciones del 22 de mayo, que cada día parecen más unas primarias que unas municipales y autonómicas. Tanto Zapatero, contradiciendo hipótesis y falsas informaciones previas, como Rajoy, van a estar muy activos en el recorrido por España. El primero, porque intenta, apoyado por el ‘efecto’ del anuncio de su futura retirada, frenar la caída en votos que los socialistas se barruntan en numerosos puntos del país. El segundo, porque necesita consolidar la ventaja que las encuestas le otorgan, pero no de manera tan definitiva como antes del ‘discurso del adios’ de ZP.
Así que el tradicional domingo de Ramos parece que va a convertirse en el pistoletazo de salida de un nuevo duelo al sol, esta vez entre Rajoy y un todavía desconocido/a candidato socialista. Pero son, teóricamente, dos concepciones de España las que se enfrentan. Solo teóricamente, claro, porque desde hace tiempo estoy convencido de que, en realidad, los proyectos de PSOE y del PP no difieren en tanto.
Decía el para mí inolvidable Georges Pompidou que la diferencia entre un socialdemócrata y un liberal estriba en el color y la marca de la corbata. Ahora, falta por ver los proyectos de cada uno. Y cómo, inevitablemente, ambos se van a ensamblar en un gran acuerdo tras las elecciones generales. Solamente esta perspectiva, de un amplio proyecto regeneracionista para España, suscrito por al menos los representantes de casi veintidós millones de ciudadanos, me anima a seguir observando con esperanza esta ramplona vida política que se pone de manifiesto, con toda su caspa, ante este domingo de Ramos.

6 respuestas

  1. Por una vez, sr Jáuregui, siento discrepar. No es lo mismo un socialdemocrata que un liberal. Y cuando se parecen es xq algo ocultan por intereses electorales. No defienden igual la «cosa pública» el PSOE que el PP. Y a los programas pasados me remito. Por ejemplo, en uno de ellos, creo que el del PP del 93 -luego lo ocultaron por impopular-, defendían la posibilidad de que el ciudadano pudiera escoger entre contribuir a la Sanidad Pública o pagarse su propio seguro privado. Es decir, la beneficiencia para los que menos tienen y los grandes avances médicos para quien se lo pueda pagar. No hay más que verlo en las películas norteamericanas. No creo que el PSOE, al menos de momento, apueste por ese sistema. Y como en eso: la enseñanza, las pensiones… bajo la excusa de que la Administración gestiona mal, pues se privatiza todo, en lugar ocuparse de que la Administración sea eficaz. La derecha lleva años diciendo que ya no existen ideologías, y lo peor es que va calando.

  2. @Maruja.
    Pues yo discrepo de usted y estoy más con el Sr. Jáuregui. No se puede considerar al PP un partido liberal en sentido estricto, como tampoco un partido conservador de la misma manera, dado que ambas corrientes ideológicas conviven (o mal viven) en la misma formación. El concepto que usted maneja de sanidad pública o privada, es más bien de neoliberales, es decir de extremistas en que confían todo a la iniciativa privada, y en ver reducido al Estado a la mínima expresión.
    Es un problema reduccionista a que nos ha llevado el bipartidismo imperante, y también las corrientes neoliberales y conservadoras en el ámbito exterior, que se han confundido en tu “totum revolutum”, que no se sabe muy que es o cuál es su idolología.
    Creo que existe o debe existir un espacio liberal-progresista, que bien es cierto se puede diferenciar de la socialdemocracia casi por el color de la corbata o la marca, pero también, en que el Estado no se convierta en una especie de “gran hermano” que todo lo vigila, controla, regula, como a veces la socialdemocracia entiende.
    Tenemos un exceso de regulación, de leyes, de ámbitos para dictar normas o comportamientos. Baste decir que hay ayuntamientos que multan por hacer footing, hasta regulaciones contradictorias entre CCAA, que generan una inseguridad jurídica rampante e inaceptable. Leyes como la LECrim., que solo han sido adaptadas, o la L.E. Civil del 2000, que necesita un lavado de cara urgente (las últimas modificaciones, tampoco aportan nada sustancial); o el nuevo Código Civil, reforma siempre pendiente y nunca abordada por los problemas que todos conocemos.
    Entiendo que debe haber una regulación marco, pero también hay que dejar espacio para que la iniciativa privada se desarrolle. Debe de haber una sanidad pública bien dotada, pero también debe existir la posibilidad de una sanidad privada, del mismo modo que existe un régimen general de la SS para percibir la pensiones y los planes de pensiones privados, que no deben ser incompatibles entre sí.
    El término medio aristotélico sigue plenamente vigente.

  3. Si la actividad de Rajoy consiste en mentir como un bellaco, más vale que renuncie a la candidatura a presiendente y se dedique a otra cosa.
    Ahora resulta que el Gobierno de Aznar, nunca negoció con la «banda».
    Cómete una papa lechón.

  4. Rajoy:»Quiero decirlo bien claro: el PP nunca ha negociado con los terroristas».
    Por favor, aterra pensar que este sujeto pueda llegar a ser Presidente del Gobierno. Aunque ya fue Vicepresidente cuando Irak, el Prestige o el 11M, no sé de qué nos extrañamos, no aprenden, se fue del Gobierno mintiendo y pretende volver mintiendo.
    Y los cientos de presos acercados, las decenas que salieron de la cárcel, las reuniones en Suiza, todas las declaraciones del mismísimo Aznar, increíble…..

  5. Ah, y en septiembre de 2000, siendo Rajoy Vicepresidente del Gobierno, el etarra Iñaki Bilbao salió de la cárcel, tras cumplir 18 años por asesinato, y en marzo de 2002 asesinó a Juan Priede, concejal socialista de Orio (Vizcaya). Os imagináis por un momento si fuera al revés ahora….

  6. yo también creo que pp y psoe han acabado asimilándose como aquel proceso de la sanchización del quijote y la quijotización de sancho.

    Hace años solían decir en Colombia que la diferencia entre Conservadores y Liberales (los dos partidos que allí hay) era que los Liberales iban a misa de 10 y los Conservadores a misa de 12. Muy Pompidouiano si se me permite.

    No, Maruja, ambos han conseguido que la cáscara parezca diferente, pero lo de dentro es prácticamente igual. Ciruelas verdes, ciruelas rojas pero ciruelas al fin. Cuando se convocan primarias y Alarte y el aparato impiden que se presente Asunción, es un psoe pepeizado. Cuando el PP se reúne con las pymes o consigue -cuando gobernaba- el acuerdo con sindicatos, es un pp pesoizado. Cuando Cospedal habla de que el pp es el partido de los trabajadores a mí me da risa, más o menos la misma que me da ver al psoe aprobando en el parlamento una reducción de las pensiones o una bajada del sueldo a los funcionarios. Etc.

    El próximo domingo de ramos más será de palmas,como se llama también, pero de palmas (a los propios) y pitos (a los extraños): los absurdos y trasnochados mítines caldean los insulsos telediarios del finde, pero no preparan nada, Fernando, y menos aún unas imposibles e inexistentes primarias. El 22 será la debacle para España, pero no dudes ni por un segundo que todos se declararán ganadores entre las 23 y las 00 horas.

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