Los talibanes se echan encima de uno de cuando en cuando. Quieren tertulias únicas, como los editoriales de los periódicos catalanes, pero en sentido inverso. Quieren columnas de opinión que vayan uniformes en el mismo sentido. Nada de disidencias. Una de las dos españas, o más probablemente las dos, han de helarte el corazón…Ay de tí el día en el que no seas políticamente correcto, el día en el que se te ocurra algo que no han pensado ellos, o en lo que, simplemente, no-está-permitido-pensar. Lástima de país, lástima.
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