No hay que cambiar (solo) caras: es el sistema, imbécil, lo que hay que cambiar

No es la economía, estúpido, lo que hay que abordar. Es el sistema, imbécil, lo que tenemos que empezar a plantearnos cambiar. Desde la Constitución paralizante hasta el funcionamiento partidario inoperante. La democarcia tiene que regenerarse o morirá, y no quiero parecer demasiado apocalíptico; es que, simplemente, estamos en el apocalipsis moral.

Me dicen que Rajoy prepara una remodelación ministerial: hay miembros del Gobierno que mantienen tensas relaciones entre sí, otros que no funcionan…Puede ser. Pero no será (solamente) cambiando a algunos ministros, o al propio Rajoy, como solucionemos los problemas. No es (solo) la gente: lo que no funciona es algo más. Es el sistema.

Qué quiere usted que le diga: que un sermón de quince palabras pronunciado, sin mayor profundidad ni más concreciones, por el presidente del Banco Central Europeo sirva para bajar la prima y subir el Ibex me intranquiliza más que lo contrario. Porque suponga usted que, en lugar de decir quince palabras que animan a los mercados, el omnipotente Draghi, ese hombre a quien nadie limita ni vigila, pronuncia una frase que provoca una catástrofe, como ya ha ocurrido con cierta frecuencia. El culpable de las oscilaciones de los mercados, en ambos supuestos, no es Draghi, como tampoco puede culparse a Mariano Rajoy por no tomar medidas drásticas de ajuste –que vaya si las toma, por cierto—o, pongamos por caso, a Mario Monti por estar conduciendo equivocadamente la vida política italiana.

La culpa podemos echársela al BCE, a los mercados, a Rajoy, a la difícil herencia recibida, a Zapatero directamente, a nosotros mismos, si usted quiere. Pero, tras ver cómo día a día fluctúan los grandes números que nos asesinan, creo que lo que falla no es el Gobierno (que también), ni la oposición (que ídem), ni las instituciones (ídem de ídem). Nadie (y todos) tenemos la culpa. Es el sistema lo que ha dejado de funcionar, ni más ni menos. Y tenemos que ir buscándonos otra cosa.

Porque un sistema no funciona si la gente que lo sustenta y lo padece no cree en el . Y dígame usted si es posible creer en algo cuya fortuna o cuya desgracia reside en el acierto o en el error de las declaraciones de un tipo, por mucho que sea el presidente del BCE, que, sin encomendarse ni a Dios ni al diablo, dice lo que la digestión de esa jornada le dicta.

He dejado de creer en la prima de riesgo, en Standard&Poor’s, en el Financial Times, en Van Rompuy y hasta, si se me permite, en Luis de Guindos. Cuando las declaraciones de los próceres a los que pagamos para que nos representen no sirven de nada, o sirven de tanto que hacen subir el precio del pan, no queda más remedio que empezar a pensar que lo que falla es algo más profundo. Si no elegimos directamente a los Draghi, a los Rehn, a los Durao Barroso, de los que nuestras vidas y haciendas resulta que dependen, si no hay sistemas objetivos de control de las agencias de calificación de riesgo, si, en el fondo, seguimos con Bretton Woods subido a nuestras chepas como hace más de medio siglo, sin que los ciudadanos corrientes y molientes podamos elevar y hacer oír nuestras voces de acuerdo o de protesta, ¿por qué diablos va alguien a exigir nuestra obediencia, nuestra aquiescencia, nuestra sumisión?

Pues eso: que hay que cambiar tanto los comportamientos que, en el fondo, lo que hay que cambiar es ‘el’ Comportamiento de todos esos que nos obligan a pasar por aros que ya vemos que ni funcionan ni nos representan. Y eso que digo no es insumisión. Ni ruptura con los cánones. Es pura lógica. Conmigo, Draghi, ni siquiera el mejor Draghi; Guindos, ni siquiera el mejor Guindos, que no cuenten.

7 respuestas

  1. ¿Acaso DC considera la «estelada» como la bandera catalana?. Yo creo que ésa es la bandera independentista, no la bandera catalana. No entiendo cómo en plena portada DC muestra esa bandera separatista como enseña catalana en una noticia que nada tiene que ver con el separatismo. Realmente sorprendente esa apología del independentismo. Esta es la noticia http://www.diariocritico.com/nacional/tribunal-supremo/catalan/valenciano/416090 y la fotografía de la estelada no sólo la acompaña sino que también se muestra en plena portada. En fin, o tienen muy mala suerte con todo la información relativa a Catauña o simplemente está controlada por independentistas. Visto lo visto, me apunto a la segunda opción.

  2. En aras de la libertad de expresión, no se puede jugar a mirar para otra parte. O DC es pro-independentista o no lo es, y si no lo es, ya está tardando en depurar responsabilidades.
    Lo que no se puede es jugar a poner una vela a Dios y otra al Diablo.

  3. Ay, Kroker, ay Luis, amigos, cuántos falsos independentistas hace la ignorancia…Son muy jóvenes algunos e ignoran el significado de una estrella más o menos, me temo…Un error, vamos. Por lo demás, claro que no –repito: no– somos independentistas. LO que supongo es que no estamos acertando en nuestra política ‘de conciliación’ con nuestra edición catalana, que, además, no está dando los resultados apetecidos.

    La cuestión no es, me parece, independentismo o no. La cuestión, para mí –y por eso pusimos en marcha la quizá desafortunada edición catalana–, es tener contentos dentro del Estado, de España, a los nacionalistas. Que se está convirtiendo en algo tan difícil como hacer una edición bilingüe en Cataluña, que es algo que no gusta ni aquí ni allí.

    Cuando Fernández Ordóñez estaba cercano a morir, me dijo unas palabras que no he olvidado: «el problema de España, Fernando no es el País Vasco, sino Cataluña, y lo digo con mucho dolor, aunque yo sé que no voy a ver el desenlace».

    Pues eso: que algunos, con la mejor voluntad del mundo y acaso con poco acierto, estamos intentando que ese problema que algunos se empeñan en crear, y luego magnificar, no lo sea tanto.

    Gracias, en todo caso, por la crítica.

  4. No me convence para nada su explicación, señor Jáuregui.Esa es bandera independentista póngase como se ponga.

    Se lo explico con otra bandera. La de Asturias. Es bien claro cual es porque es la que hoy se verá con claridad en los seguidores de Alonso en Fórmula 1. Pero si a esa bandera se le agrega una estrella roja, el significado es diferente.

    Está usted en disposición plena de entender esa diferencia.

    Un saludo a Luis, Kroker y a usted.

  5. Son las 13:01 y la estelada separatista catalana sigue acompañando a la noticia en cuestión:
    http://www.diariocritico.com/nacional/tribunal-supremo/catalan/valenciano/416090 . Sólo ha desaparecido de la portada.

    El hecho es todavía más grave dado que la noticia no es referente a Cataluña sino a la Comunidad Valenciana. Parece que DC no sólo apoya al independentismo catalán sino a su imperialismo anexionista de los llamados «Països Catalans».

    Y encima parece Vd querernos dar lecciones de no se sabe qué historia sobre la estelada separatista catalana. Esa bandera añadió la estrella de la bandera de Cuba a la bandera catalana para demostrar inequivocamente que era la bandera de los independentistas. Por favor, no tenga la desfachatez de llamar ignorantes a los que simplemente le están mostrando la realidad tal como es. La realidad del medio en que Vd es editor, por si no se ha enterado.

    Por otro lado, no se escude que si la edición catalana funciona o no funciona. Eso es indiferente y no tiene relación con mi denuncia. La noticia que he denunciado aparece en la edición española de DC y me importa un bledo si está escrita desde Cataluña o desde cualquier otro punto. Vds son responsables de los contenidos que publican y punto.

    Si Vds tienen un problema en su edición catalana, arréglenlo y no contaminen la edición española con ese problema. Ya lo denuncié cuando el famoso Cataluña fusilada al amanecer, pero ahora quedan ya pocas dudas: DC es un medio alineado con las tesis del independentismo catalán.

  6. He esperado a que pasaran 24 horas desde mi denuncia de ayer para escribir este post.

    La estelada separatista catalana sigue ondeando en una noticia que afecta a la comunidad valenciana http://www.diariocritico.com/nacional/tribunal-supremo/catalan/valenciano/416090 lo cual constituye un insulto y una vejación para muchos valencianos, catalanes y españoles. Esta mañana el señor Jáuregui echaba balones fuera e insinuaba que se trataba de un error de algún becario. Pero han pasado las horas y no sólo no se van a depurar responsabilidades, como solicitaba el amigo kroker, sino que ni siquiera nadie en DC se ha dignado en subsanar ese supuesto «error».

    Yo particularmente no soy una persona demasiado orgullosa de ser español. Es lo que me ha tocado porque aquí nací y españoles eran mis padres. No soy precisamente ningún patriota. Pero lo que tengo claro es que defenderé mis intereses y los de mis hijos, por los que he siempre luchado con todo mi esfuerzo y que seguiré haciéndolo. Y esos intereses son la antítesis de lo que representa el separatismo catalán. Ellos quieren destruir mi nación, la convivencia entre los españoles y hacerme a mi y a mi familia más pobres. Son mis enemigos.

    Hasta hoy he sido un lector más o menos asiduo de Diario Crítico. Hoy me doy de baja. Ya no les visitaré más ni discreparé en ninguna de sus noticias. He eliminado el contacto de los marcadores del navegador. No deseo incrementar el contador de clicks de su diario ni contribuir a incrementar la publicidad de un medio como Diario Crítico que parece que está al servicio o en la sintonía de los que intentan destruir España. Hay otros medios de Internet más plurales en donde informarse y en donde uno puede opinar y discrepar democráticamente, medios que no se acomplejan de defender los intereses de la Nación española, la patria de todos los españoles.

    Nos volveremos a ver en Internet. Viva España y viva la libertad.

    Un saludo para todos,

    Luis

  7. @ Luis.

    Cada uno es libre de tomar sus propias decisiones; pero yo sigo, como los «últimos de Filipinas», y no voy a dejar que por aburrimiento ganen la partida esa pandilla de mentirosos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *