Precisamente hoy, quiero estar aquí

Hoy, precisamente hoy, no podía faltar aquí mi columna. Aunque este, la de compartir este espacio con ustedes vosotros, sea más un placer que un trabajo. Hoy, precisamente hoy, tengo que estar aquí, y enviar esta columna a la agencia que me la sindica. No lo digo, claro está, porque mis comentarios resulten necesarios, y aún menos imprescindibles: es que hoy, precisamente hoy, no quiero estar ausente.

Porque lo he dicho otras veces, pero precisamente hoy tengo que repetirlo: no creo en esta huelga, que no va a conseguir derribar los muros de una ley. Ley esta de la ‘reforma’ laboral que, de acuerdo, es mala a rabiar, pero que ya está aprobada por el Parlamento y, por tanto, solo la realidad (que es tozuda, pero se demora) va a modificar esta extraña reforma laboral que tantos parados va a producir, me temo.

Pero a lo que iba: no será la huelga, cuyo seguimiento imagino, aunque, lógicamente, ignoro cuando esto escribo, la que cambie el ‘laboralazo’. En cambio, el paro, que inevitablemente traerá algunas escenas de tensión en las calles, de coacciones indeseables, va a provocar muchos más males que bienes pueda producir: va a tensar, como si no lo estuviera ya bastante, a la sociedad española, dividiéndola entre quienes se adhieren al paro y quienes no lo hacemos; va a desgastar a un Gobierno que está a punto de desguace, y eso, mírese como se mire, no es bueno; va a empeorar la imagen que los españoles tiene de los sindicatos, que, a partir de ahora, tendrán que reflexionar sobre su propia esencia. Y hará que esos medios internacionales que tantas ganas tienen de que España vaya mal encuentren abundancia de imágenes para sustentar sus afirmaciones.

No, yo no hago huelga, aunque poco más pueda hacer hoy que escribir este humilde desahogo.

15 respuestas

  1. Señor Jáuregui, no escribió usted en su post anterior sobre Camps ningún comentario ni ninguna réplica a todos los argumentos que le fuimos dando quienes poníamos objeciones, que no fueron pocas, a algunas de las valoraciones que usted hacía en su artículo. Quizá Ángel Luna se haya pasado tirando la piedra, pero estamos comparando una piedra con un caso de corrupción en el que están implicados un montón de personajes del PP y su órbita. Como a lo mí lo que me gusta es debatir cuando entro aquí, entiendo, como dice el dicho, que el que calla, en este caso usted, otorga. Un saludo.

  2. ¿El miedo es libre?

    Reconozco el mérito que tiene tu columna en cuanto afirmación pública de una actitud y dce una postura social y política.

    Creo que los españoles tenemos cada vez más miedo a comprometernos públicamente y recientemente lo he visto muy de cerca.

    Ahora leo tu columna mientras oyentes anónimos llaman a RNE y dicen, con éstas u otras palabras, que no quieren hacer huelga, pero que les da miedo significarse o que les amedrenten los piquetes o…, y que por eso harán huelga.

    ¿Ya no vivimos en un estado social y democrático de derecho bajo el Imperio de la Ley?

    En los ejércitos es usual aquello de «¿Valor? Se le supone» y en la calle solemos decir que «el miedo es libre».

    Sin embargo, en mi opinión son muchas las veces en que disfrazamos de miedo lo que no es más que falta de compromiso. Me resulta difícil de creer que nadie vaya a perder su trabajo por secundar mañana la huelga pero más difícil me parece creer(me) que a alguien le va a pasar algo por decidir ir a trabajar.

    Ni los empresarios son una banda de gangsters y mafiosos ni los sindicalistas son matones salidos de Manlleu para perseguir a los esquiroles de Sta Mª del Corcó.

    Por supuesto, esto no quiere decir que no haya extremados de lado y lado, locos dispuestos a jugarse el futuro cercano de su empresa despidiendo a trabajadores en huelga o piquetes violentos, pero no creo que la casuística dé ni para porcentaje.

    P.S. creo recordar que el código penal distingue miedo y miedo insuperable y en este último caso establece unos requisitos muy estrictos que no parecen darse ahora.

  3. Nada que objetar. Y me encanta la diferencia entre miedo y miedo insuperable del Codigo Penal que nos trae Pascuamejia. No creo que ninguna de las movilizaciones promovidas por los sindicatos desde la llegada de la democracia haya estado tan poco prestigiada.

  4. Quisiera saber la opinión de Don Fernando Jáuregui sobre la retirada de la imputación a José Tomás García, más conocido como «el sastre de Camps». Diariocrítico ha sido uno de los medios de comunicación que más ha contribuido, sin ningún tipo de pudor, al linchamiento público de esta persona. Lo curioso del tema es que en este periódico digital se permiten dar lecciones sobre lo que es un linchamiento, sobre distintos grados de linchamiento, o sobre a quién se puede linchar y a quién no. Curioso.

  5. […] Cenáculos y Mentideros » Archivo del Blog » Precisamente hoy … […]

  6. De acuerdo con todos. Y no digo más, que me voy a trabajar y ando ya mal de tiempo.

  7. Hoy voy entusiasta al tajo
    y hasta al jefe encuentro majo.
    Yo (que rara vez trabajo)
    hoy trabajo, qué carajo.

  8. Y a destajo
    con el contrabajo
    y el marrajo
    Total, haga lo
    que haga
    me voy a partir
    de cuajo
    y me voy a sentir
    o esquirol
    o zapatajo

  9. Tercera fugaz escapada
    Del hoy vergonzoso tajo
    En el ripio antes perpetrado
    No supe meter badajo
    Y la prisa me sustrajo
    el adjetivo fatal,
    total, haga lo que haga
    me voy a sentir fatal
    (nada, que como bardo
    no estoy a la altura)

  10. […] Cenáculos y Mentideros » Archivo del Blog » Precisamente hoy … […]

  11. A Pedro:
    Me gustaría que me enviara enlaces con ejemplos de ese linchamiento al sastre desde Diariocritico. Un sastre cuya actuación, por cierto, me parece discutible (hizo declaraciones contradictorias, por ejemplo). Como tantas otras cosas al menos discutibles, por lo demás, en el Gürtel valenciano’.
    Saludos

  12. Malatesta, testa mala, carajo,
    nos dejas el gusanillo del verso
    y posesos por la fe del converso,
    el primo Ignacio nos rima a destajo

    y Bruno nos bardea bocabajo.
    De aquesta huelga extraña en el reverso
    nos sale de poemas universo
    y al leerlos me pongo cabizbajo:

    ¿Dónde están de Malatesta sus ripios?
    ¿Por qué ya no escribes en este foro?
    ¿Se te acabaron ya los participios?

    No: más será que te molesta el coro
    de estos ripiadores de municipio.
    No sigo, que es otoño y me acaloro.
    =======

    Huelga decir que me huelgo de holgar,
    pero al gran Malatesta echo a faltar
    ¿Qué pasó, jubileta?
    ¿Dejaste esta charleta?
    ¿Buscaste otra mejor?
    Te regalo esta silva endecasílaba,
    muy bien medida pero mal rimada,
    a ver si así te animas,
    vienes y nos conminas
    que con este calor
    huelga decir que me huelgo de holgar
    y si al gran Malatesta echo a faltar
    es que causa dolor
    tu ausencia o su agror.

  13. Señor Jáuregui, el linchamiento de una persona también consiste en sembrar dudas y sospechas sobre su honestidad SIN APORTAR NI UN SOLO DATO O DOCUMENTO QUE LAS CORROBORE, tan sólo cábalas o suposiciones. Ustedes escribieron el 16 de marzo de 2009 en su sección Exclusivo lo siguiente:

    Los 5 puntos no muy claros sobre el sastre de Camps

    La última polémica en el ‘caso Gürtel’ ha sido, como bien saben, la de los trajes del presidente valenciano y las declaraciones de su sastre al diario El País, en plan ‘garganta profunda’. Pues bien, el caso es que este ‘profesional’, José Tomás, con nombre de torero, habría dado lugar a puntos no muy claros a la hora de relatar lo sucedido con el tema de los trajes de Camps.

    En la entrevista concedida al diario de Prisa, el sastre ofrece algunas dudas sobre el tema, y se lo explicamos a continuación:

    1. El juez Garzón afirma en su propio auto que los pagos se produjeron a través de cheques o de transferencias bancarias. No habla de pagos en metálico. Sin embargo, en la entrevista del domingo, José Tomás afirma que “Pablo Crespo [ex secretario de Organización del PP gallego y ahora encarcelado por orden del juez Baltasar Garzón] venía cada seis meses con un fajo de billetes de 500 euros y pagaba 30.000 o 35.000 euros” por los trajes de Camps y de otros políticos valencianos y empresarios investigados en la «Operación Gürtel”.

    2. Si como afirma José Tomás, las facturas no pasaban por él ¿cómo puede saber quién pagaba o dejaba de hacerlo?

    3. Fechas contradictorias: En el auto de Garzón se habla de pagos a ‘Forever Young’ a partir de 2006, sin embargo, en la entrevista publicada este domingo, según Tomás, “Crespo pagó a Forever Young en 2005, primer año de su relación, entre 60.000 y 70.000 euros”. Por otro lado, si José Tomás entró a trabajar en Forever Young en septiembre de 2006 y afirma en la entrevista que la relación con Camps “duró un año y pico”, cómo puede aclarar los supuestos pedidos pasados los dos años.

    4. ¿Pretende involucrar a raíz de la entrevista a Telecinco y a Antena 3 por colaborar en la ejecución de facturas falsas?

    5. Las causas del despido: Despedido por ‘Forever Young’ a principios de febrero por hacer facturas falsas, y no como él dice por declarar ante Garzón. Actualmente, José Tomás está jurídicamente enfrentado a su empresa peleando por hacer efectivas las condiciones de su contrato, ya que era blindado. ¿No podría José Tomás estar evitando su imputación en la trama a costa de ir de confidente acusando indiscriminadamente?

    Llamarle a José Tomás profesional entrecomillando esta palabra (José Tomás es una persona especializada en ventas y con conocimientos de sastrería que ha adquirido con los años), insinuar si pretendió colaborar en la realización de facturas falsas (ésta es la peor insidia de todas, porque ahora es el señor Hinojosa el sospechoso de haber actuado con negligencia, y, de hecho, ha perdido los seis juicios que tenía contra José Tomás), pensar si quería involucrar a otros medios de comunicación por no sé qué historias o todas las preguntas insidiosas que se hacen a lo largo de estos párrafos (lo de querer librarse de la imputación por métodos oscuros, por ejemplo) es, si me permiten, una demostración de muy mala baba contra las personas que a ustedes no les gustan. Me parece bien que ustedes tomen la postura que quieran respecto a Camps (que por cierto, está bastante más metido en el fregado que su sastre), pero no traten a la gente con doble rasero. Camps es el más inocente y bendito del mundo y su sastre es un demonio. Pues no. Eso es intolerable en un medio de comunicación.

  14. Estoy en parte de acuerdo con Pedro: cada vez hay más periodistas que confunden información y opinión. Estaría bien que, igual que cuando un anuncio se disfraza de noticia se obliga a pretitular PUBLICIDAD, cuando un periodista opinara se advirtiera de ello al lector. O, mejor aún, establecería un sistema en función del número de adjetivos calificativos y adverbios que contuviera la noticia.

    Otra cosa es que diariocritico defienda al presidente Camps a ultranza. A mí no me lo parece, al menos como línea editorial y, en todo caso, he leído en dc bastante contra FC y yo mismo le he dado bastante leña.

    Creo que un gobernante debe hacerse a un lado cuando le salpica cualquier sospecha de fraude o cohecho propio, impropio o mediopensionista con independencia de lo que luego digan los tribunales. (Alguna vez, Fernando, has comentado sobre las injusticias que se pueden haber cometido en el pasado contra personas que dimitieron y luego la acusación fue falsa. Prefiero este riesgo -la mujer del césar, etc.- que ver de presidente de una Diputación a un corrupto que ni paga impuestos o de Presidente de una CCAA a un hombre tocado políticamente por la sospecha).

    También creo que ningún gobernante (presidente, conseller, secretario de estado, ministro…) debe quedarse los regalos que recibe en el ejercicio de su mandato (man-da-to, o sea poder vicario) y todos ellos deben ser registrados públicamente y permanecer en un museo de los horrores una vez se cesa en el cargo (es lo que hacen los países civilizados). A este respecto, alguna vez he contado la anécdota del vestido de Nancy Reagan, a ella me remito.

    Por otra parte, lo más grave de la denuncia de Pedro, más allá del medio a que se la dedica, dc, es la pérdida de independencia de los medios de comunicación. Por irnos lejos y no pisar callos, ahí está Murdoch con sus periódicos, televisiones y agencias de noticias. Pasa algo semejante en nuestros lares. Y en los lares de los otros lares, de esto no podemos salvarnos fácilmente, excepto con periodistas de honradez y ética firmes y claras.

  15. Fernando,
    Me incorporo desde mi nuevo iPad como seguidor de tu blog. Por el momento me sumo a tu opnion y te felicito por el comentario del pasado día de la huelga.muy acertado. Un abrazo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *