Me dicen que Rajoy va a tratar de mostrarse más simpático, más cercano. Están alarmados por el descenso en la popularidad del PP, en general, y de su presidente, muy en particular. Si realmente quiere, y parece que quiere, presentarse a las elecciones de dentro de un año, mucho va a tener que sonreir y no a través del plasma.
http://www.diariocritico.com/nacional/partido-popular/mariano-rajoy/elecciones/reforma-constitucional/artur-mas/gran-coalicion-pp-psoe/467929
Como bien sabes, no me gusta nada este hombre: es indolente, poco preparado y planifica muy mal el medio plazo (el largo plazo para él no existe). No es mala persona y seguro que no ha metido mano en la caja, pero tanto su mabera de entender la política cuanto la democracia y lo que es España no tienen cabida en este tiempo. Esta desfasado y resulta un anacronismo en los foros internacionales, no saber ingles es una gran excusa y nos evita una vergüenza aun mayor: oirle hablar de economía, globalización o futuro, cosas de las que sabe mas bien poco. Si este hombre quisiera a su partido y sintiera responsabilidad por España se haría a un lado y cedería el testigo a alguna de las personas de valía que no ha ejecutado dentro del PP: Soraya, Ana Pastor, Luisa Fernanda, Feijoo aunque este ultimo, como bien sabes dice que nasti
A propósito de su último artículo: señor Jáuregui, usted sabe mejor que nadie que, por la idiosincrasia de este país, un acuerdo de gobierno PP-PSOE es imposible. Esto no es Alemania. No se engañe a sí mismo y a los pocos ingenuos que se crean que es posible.
Bromea usted con el plasma, pero lo más vergonzoso no fue ver a Rajoy en el plasma, sino la imagen de decenas de periodistas sentados delante de aquella pantalla sin levantar la voz, como corderitos sumisos que tragan con todo. Ante todo fue un día negro para el periodismo.
Y yo pregunto: ¿Qué pretende hacer este merluzo, transplantarse
la simpatía como si de un implante de pelo se tratara? No se lo
recomiendo, porque con lo cenizo que es, seguro que la simpatía
Se me ha ido el dedo y he pulsado donde no debía; decía que con lo
cenizo que es, seguro que el implante de simpatía le causaría un gran problema de incompatibilidad histológica que acabaría con su inane
vida en menos que canta un gallo; difícil misión, querido Urkel.
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