Zapatero entra en el medio siglo –felicidades, por cierto, a los que hoy cumplen años, incluyendo a ZP y a Obama, que dudo que reciban este mensaje– con dos buenas noticias como regalo, para él y para todos nosotros. Una, la detención del tipejo, el tal Gurutz Aguirresarobe, que mató a Joseba Pagazaurtundúa en 2003: todos acaban en la cárcel tarde o temprano. La segunda buena noticia es la caída del paro en julio en casi 74.000 personas, aunque, eso sí, con más del 90 por ciento de contratos temporales. Sobre lo primero, ya he expresado muchas veces mi confianza en la próxima extinción práctica de ETA. Sobre lo segundo, temo que el parón en la obra pública y en la función pública van a generar bastante paro nuevo –cien mil desempleados en los próximos meses, calcula Comisiones Obreras–. Pero, en fin, son dos regalos de cumpleaños solamente amargados por la huelga irresponsable, antipatriótica, egoísta e injusta de esos controladores aéreos que está encantados de echar un pulso al Estado y de jodernos a todos. Pero sobre eso hablaré hoy en mi artículo para Off The Record, del que aquí dejaré noticia.