Sabor agridulce

No sé si me he quedado contento con esos acuerdos parciales entre ZP y Rajoy. A mí no me basta sino con un gobierno de gran coalición durante un par de años. Y luego, disolución de las Cortes, referendum sobre la reforma de la Constitución en lo que hay que reformarla urgentemente (igualdad de derechos para acceder al trono, independientemente de sexos), elecciones y que gane el mejor.

¿Cómo se puede excluir la economía de un gran acuerdo nacional? ¿Y la inmigración? ¿Y la reforma de la normativa electoral? ¿Es que pensamos que con un nuevo amaño sobre los jueces, con cuatro vaguedades sobre el terrorismo, hemos cumplido los objetivos? Pues nada de eso. Hay mucha GENTE QUE PIENSA QUE ESTO PINTA MAL, Y SU CONFIANZA SE REFORZARÍA SI LOS DOS PARTIDOS QUE SUMAN CASI 22 MILLONES DE VOTOS SE PUSIESEN DE ACUERDO SOBRE COSAS TRASCENDENTES. Pero ‘ellos’ , que son los dos grandes y todos los pequeños, parece que no lo entienden, y ahí estan, racaneando acuerdos (sí, es mejor que en la pasada legislatura, pero…), organizando saraos conmemorativos, perdiendo un tiempo precioso.

7 respuestas

  1. Me temo que te voy a llevar la contraria. No es bueno que haya acuerdos en materia económica entre los dos grandes partidos, eso sería un síntoma y muy malo. Me explico. La economía va a ser la punta de lanza del argumentario del PP para llegar a Moncloa. La escenificación de hoy nos lo confirma, el PP abandona su tradicional oposición para dedicarse a reforzar su imagen de gestor económico a la espera de que la crisis desangre al gobierno. Así, con «dulzura», sin crispación y repitiéndonos constantemente que ellos lo hicieron bien en el 96 y que tienen la fórmula de la cocacola; esa va a ser toda su oposición.

    La única posibilidad de que haya acuerdos es que el gobierno vaya tomando medidas liberales. Ahí SI, el PP le apoyará y dejará que el PSOE cargue con todo el desgaste que dichas medidas conlleva. Por resumir. La única manera de que se produzca un acuerdo global en materia económica sería que el PSOE le hiciese el juego al PP; cosa poco recomendable. De producirse eso, como he dicho más arriba, el acuerdo sería un síntoma.

  2. Señor Jauregui: Usted quiere pasar de la nada al todo, creo que esto es un pequeño paso, importante, pues no teniamo nada de nada.

    Personalmente espero que se cree un nuevo cambio en la política española, que lo que se haga sea por el bien de todos y no por el bien de los partidos políticos de turno.

  3. Estimado Sr Jaúregui

    Coincido con usted en la pobreza de los acuerdos. Para ese viaje, no necesitabamos alforjas. Hubiera bastado lo negociado por «Toño» Alonso y Soraya y un telefonazo cordial para confirmar los datos.

    Zapatero ha buscado la foto, como siempre, y Rajoy ha vuelto a dársela. Solo hay una cosa en al que difiere esta de otras entrevistas. Rajoy le hizo el «ofertón» al socialista de «pactar» las medidas de la crísis. De haber aceptado, la responsabilidad ante «la que viene» habría sido compartida y la economía no hubiera servido como instrumento de oposición. Pero el circunflejo Zapatero ha optado por la soledad. Veremos…

    No obstante le veo un poco ingenuo y voluntarista en su comentario, los políticos españoles buscan solo el poder, la razón de Estado y el interés general, lamentablemente, son la anécdota.

    Un saludo

  4. Que si, y que se jodan los nacionalistas, ¿verdad? Ay, cuanto bipartidfista olvidando que el Estado no son uno y uno, sino varios más

  5. Sr. Jáuregui, coincidirá conmigo que tenemos la peor clase política de nuestra democracia y quizá más allá: mal preparada (sólo hay que darse una vuelta por los cuadros de los principales partidos, al 90 por ciento le costaría encontrar un trabajo decente en el sector privado) y, en consecuencia, sin ninguna altura de miras y de asunción de las responsabilidades para las que han sido nominados. La gente válida, los virtuales líderes sociales que se han conocido en otras épocas han huido de estas miserias. Por tanto, veo muy complicado que haya acuerdo de ningún tipo entre PP y PSOE para tomar las numerosas y dolorosas medidas que requiere nuestro desventurado país. El sistema educativo público está hundido, la iniciativa empresarial inexistente, la organización administrativa del estado es insostenible y encima hemos enterrado la mitad de nuestra riqueza en ladrillo hipervalorado, un activo que ni ayuda a curar enfermedades, ni crea más trabajo, ni más riqueza. Al contrario, la está destruyendo por su propia depreciación. Coincido con surco. El PP dejará que todo se siga pudriendo. Pero, ojo, ese periodo de podredumbre puede durar 10, 15 ó 20 años, ahí tenemos el ejemplo de Japón. Creo necesario que los medios de comunicación se pongan de una vez al servicio de los ciudadanos y dejen de dorar tanto la píldora a la clase política. Echamos de menos medios independientes. TODOS, digo TODOS, tienen unas ataduras que resultan poco menos que fraudulentas cuando se trata realmente de servir mediante la información y la opinión a los ciudadanos. Desgraciadamente dentro de esa breve enumeración de lo que está mal en España no puede tampoco faltar la clase periodística en su conjunto.

    Saludos

    Green Field

  6. A Green Field:
    coincido bastante, incluso en lo de la clase periodística. Pero ni este país es desventurado –que cuando peor estemos, estemos como ahora–, ni toda la clase política está corrompida, aun que sí mal preparada. Creo que tanto Zapatero, con toda sufanfarria, como Rajoy, con su falta de valor, son personas con sentido del servicio a España, cada cual a su a veces torpe manera. Un entendimiento entre los dos, en estos momentos de crisis, sería muy conveniente, incluso a nivel económico. Porque no nos engañemos: las recetas no son dispares, si es que las hay, ni los programas, si se miran bien, tan opuestos.
    Yo sigo creyendo que ahora nos vendría bien algo parecido a un gobierno de gran coalición. Y, aventurándome un poco, pienso que algo parecido a eso –pacto de legislatura, pactos de amplio espectr– acabaremos teniendo.

  7. ¡Y vuelta la burra al pasto,sr.Jaúregui¡. Así que la reforma constitucional para que todo dios(ellos o ellas) puedan ser reyes/reinas.
    ¿Y los ciudadanos?.Admitiendo, que es mucho admitir, que el tema del rey, fuese un acuerdo en un momento concreto, por una serie de circunstancias especiales y todo lo demás, ¿se sigue manteniendo la misma situación?.
    Sr. jaúregui: ¿es la misma sociedad la de 1978 que la actual?.¿Todavía no estamos preparados los ciudadanos para decidir la forma de estado?

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