Y después de Zapatero, ¿qué?

Salvando todas las distancias –a Zapatero le respeto, al otro no–, se puede preguntar ahora aquello del libro de Santiago carrillo en 1974: «y después de Franco, ¿qué?». Pues eso: y después de ZP, que me parece que ya empieza a tener color cadáver político, ¿qué?
Me he puesto a hacer algunas elucubraciones y me ha salido esto:

[tele=http://www.diariocritico.com/tv/video/8735/editorial-diariocritico-crisis-politica-economica.html]

8 respuestas

  1. Después de Zapatero, Congreso Extraordinario para la renovación, cuatro años de oposición a Rajoy y a la Moncloa, con nuevo equipo. Sencillo.

  2. Sr Jáuregui, voy a matizar en parte lo que dice en su artículo y a comentar al bueno de Franesco.

    La economía tiene parte de estado de ánimo, pero si hay algo con mucho de estado de ánimo es la política, y Zapatero está KO

    Ya no hablo de margen político, hablo del estado anímico del presidente y de su credibilidad. Si hubiese posibilidades de que este gobierno volviese a tomar las riendas, Zapatero debería seguir; pero es que resulta que lo que viene por delante parece peor que lo que acaba de pasar, y el gobierno es débil. ¿Usted cree que este Zapatero va a poder enfrentarse a una huelga general?. Si consigue un acuerdo que firmen los sindicatos, ¿Usted cree que este Zapatero va a tener la fortaleza suficiente como para defender lo pactado en Europa o ante unas hipoteticas presiones del FMI?. ¿Usted cree que este Zapatero puede seguir con un aumento gradual del paro en el próximo año y medio?

    Lo de ayer no solo le dejó tocado a nivel nacional, también lo hizo en el plano internacional.

    Le citaré yo también a Fray Bernardo de Sunsunilla 😉 quien dijo aquello de » si no es bueno moverse, ni permanecer; lo mejor es no estar».

    Zapatero tiene muy tocada su credibilidad con los sindicatos ( tras cambiar su política en 24 horas sin consultar), ya la tenía con la patronal ( tras negarse a cambiar su política en estos años), está tocado en Europa ( de cara a Alemania, no deja de ser el niño al que ha habido que dictarle los deberes de gasto por haber despilfarrado), y lo tiene muy difícil en el ámbito parlamentario.

    Mi solución ( que no tiene por qué ser la buena). La de Suárez. Eso puede que nos de algo de credibilidad inicial en Europa, que le de algo más de oxígeno parlamentario al partido en el gobierno, y que le de un margen de confianza al nuevo ejecutivo con los agentes sociales. Ese gobierno lo tendría muy difícil, pero puede que, de entrada, tuviera algo de margen de movimiento.

    Y aquí enlazo con Franesco. El psoe se va a jugar muchas cosas en los próximos años. Si lohace bien, puede llegar a Moncloa, incluso antes de esos 4 años. Si no se hace bien, el tema va a ser muy delicado. al final va a depender de él.

  3. oiga, y lo de el cambio de gobierno se lo digo después de decir hace dos meses que Zapatero tenía que hundirse con el barco por respeto a su electorado. Pero es que resulta que se ha hundido antes que el barco, y que su permanencia no es buena para el propio barco. La verdad es que no me esperaba un deterioro tan repentino del ejecutivo. Voy a tener que despedir a la bruja Lola.

  4. No te hacía ignaciano, Fernando, ni tampoco jesuítico, que era la palabra hermosa con que antaño llamábamos a los maquiavélicos católicos.

    Yo, que soy más del ala protestante a pesar de mi ateísmo, creo por el contrario que en tiempos de crisis lo que se impone es el cambio, no la quietud ignaciana ni la desaparición que propugna surco. El cambio y el movimiento son más necesarios en un cambio de paradigma como el que estamos viviendo que en cualquier otro momento.

    No me gusta Rajoy porque su mediocridad y su holgazanería son conocidas incluso entre sus huestes -según me dice alguien del equipo de estrategia del PP, le llaman «El Guardia» y él cree que es por lo bien que regula a su partido, pero se refieren a que «es más flojo que la chaqueta de un guardia»-.

    España no resistirá tres presidentes consecutivos en crescendo de mediocridad. Claro que, dicho así, parece que España se fuera a hundir. Pues no, no se hundirá, seguirá adelante, pero tan retrasada, tan renqueante y tan a la zaga de Europa que pareceremos bananeros. ¿Será posible que volvamos a oír aquello de Europa empieza en los Pirineos?

    El presidente Zapatero aguantará el tirón y, salvo que adelante las elecciones, hasta puede que vuelva a ganar si el oponente es El Guardia.

    Me dicen en el PSOE que esperan que en 2012 la crisis esté remitiendo grandemente, que la bonanza y la esperanza vuelvan a instalarse en los votantes y que el PP siga como hasta ahora: con una oposición ininteligible para cualquiera alfabetizado y con un candidato que no solo ha perdido 2 elecciones generales contra Zapatero, es que ha perdido además 5 Estados de la nación y dos debates televisivos.

    Y me dicen en el PP que psicológicamente Rajoy se siente incómodamente perdedor frente a Zapatero y, otros del PP más recios, añaden «¿Te has dado cuenta que nada se oye de Gallardón en los últimos meses? Algo está tramando.»

    En fin, o nos volvemos un poco calvinistas en nuestros planteamientos o no saldremos de ser los pigs del club mediterranée.

    Un saludo

  5. Ah, me olvidaba de una cosa retrasada. En algún post indicabas que no entendías esta crisis y, con animus iocundi te la voy a contar como se la he contado a mi hija de 10 años.

    Un chico de 2º de la ESO -13 o 14 años- entra un día en la clase de mi hija y ofrece medio euro por las chuches de cada niño. Digamos que de los 30 que hay en clase, 10 aceptan y venden.

    Dos días después el mismo chico regresa y ofrece 1 euro por las chuches. 12 niños más aceptan y venden sus chuches.

    Dos días después regresa y esta vez ofrece 3 euros por las chuches y aceptan los 8 que faltaban por vender. ya nadie tiene chuches en la clase de mi hija.

    Al día siguiente el chico vuelve y ofrece 5 euros por las chuches, pero ya no queda nadie con chuches así que no compra. Dice entonces que volverá dentro de unos días y mantendrá el precio por si alguno todavía quiere vender.

    Vuelve al día siguiente y ofrece vender sus chuches a 5 euros. Por supuesto, nadie le compra.

    Dos días después envía secretamente a su mejor amigo con el encargo de vender las mismas chuches por 4 euros. Los niños de la clase de mi hija son pequeños pero no tontos y enseguida se dan cuenta de que pueden comprar ahora por 4 y revender mañana por 5 con una ganancia clara. Piden prestado a sus padres, a otros niños, algunos amigos del de 2º de la ESO, rompen la hucha y compran las chuches a 4 euros. Incluso algunos, espabilados como los que más, compran a los niños de otras clases sus chuches al mejor precio posible ya que las chuches cotizan al alza en la Bolsa de Primaria y ya no es posible conseguirlas a uno ni a dos euros.

    Pero el primer comprador de 2º de la ESO nunca más vuelve a aparecer. Ni tampoco su mejor amigo, el revendedor de las chuches. Ahora los niños de la clase de mi hija se encuentran con muchas chuches y deudas. O pagan las deudas o entregan las chuches en pago, solo que ahora las chuches han vuelto a su precio anterior y ahora no consiguen más allá de un euro por ellas.

    Pues básicamente, Fernando, esto es lo que ha pasado. Y a nivel planetario. Claro que, como dice el más inexorable de los principios no escritos de la economía, «Más tarde o más temprano, en un lugar del mundo o en otro, alguien acaba pagando». Hoy nos está tocando pagar en Europa, pero ya hay muchos movimientos para que el siguiente en el pago sea latinoamérica y vamos a venderles los derechos titulizados sobre las chuches más o menos a partir del 2013. Te hago otra apuesta si quieres.
    Un saludo

  6. A Pascua:
    ¡Socorro! Vendo chuches, aunque sea a un euro…
    (lo de Latinoamérica me locreo. Yo también lo he llegado a pensar…)

  7. El primer ministro japonés, Yukio Hatoyama, ha anunciado su dimisión. Emocionado y al borde de las lágrimas, Yukio Hatoyama ha dicho que ha trabajado con una visión a largo plazo «difícil de entender» para la población japonesa. El dirigente también ha pedido la dimisión del secretario general de su partido, Ichiro Ozawa, considerado uno de los hombres fuertes de la política japonesa y artífice de la victoria electoral de los demócratas en los comicios del 30 de agosto, que pusieron fin a más de medio siglo de Gobierno del Partido Liberal Demócrata (PLD). Y no pasa nada en Japón. ¿Por qué la ética y la estética no existe aquí? ¿Por qué no dimite Zapactero Trapacero si la sociedad española no le entiende ni entiende que traicione sus principios por un plato de lentejas?

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