Basta, basta ya de esta invasión de ex políticos –bueno, políticos siguen siendo– que nos cuentan sus memorias adulteradas, nos dan sus consejos envenenados y nos tratan como a niños desviados, a los que, por cierto, ellos no pudieron enderezar. Basta de los Aznar, Felipe, Guerra, Aguirre, Pujol, Bono, Piqué…No sé si lo que quieren es volver a la poltrona o, simplemente, vender más ejemplares de sus libros. Pero ya está bien de su mercancía averiada, de sus recetas pasadas de moda. España necesita gente nueva, caras nuevas. Y eso incluye también a los del presente, a todos nosotros, que debemos ir reduciendo nuestros protagonismos, aunque sigamos creyéndonos imprescindibles; los cementerios están llenos de imprescindibles, y a algunos nos falta menos para llegar allí…Hay que saber tener la grandeza de ir retirándose.
Deja una respuesta